Los amores que se expresan en silencio siempre acaban mal. Allí estabas tú, como siempre, pero no todo era como siempre. Yo había cambiado. Por aquel entonces ya me gustaba profanar con orgullo que te había olvidado ¿por qué me gusta jugar tanto con la suerte? Y así es el amor, supongo. Digamos que si pasado el tiempo no he sacado conclusiones válidas sobre una relación, me propongo pasar página, en realidad cerrar el libro. Archivar las fotos de los corazones rotos.
No quiero pecar de dramatismo, amarte ya fue mi Romeo y Julieta. Nunca me acostumbraré a la fama que me dan las horas bajas ¿a qué tanto protagonismo? Y después de todo, ¿sabes? después de todo es como si no te hubieses ido. Qué trauma, a veces, me parece que te estás volviendo. Yo me contentaba con saber que tu nombre cada día me parecía más raro y un día, así como quien no quiere la cosa, me parece el más hermoso del mundo, ¿tú te crees? Podrían escribir un libro sobre estas cosas del amor. Yo nunca he amado a muchas personas ¿sabes? el amor para mi es como... ¿cómo decirte? digamos que el amor me sucede una vez al año y luego ya sólo quedan las fantasías sexuales ¿entiendes? Yo te quería a ti y estaba seguro de lo que quería. No debe de ser tan difícil comprenderlo.
No obstante, me desenamoro. No hay un tú y yo, suena tan triste ¿no es cierto? No habrá un final feliz, ¡qué va! ni siquiera llegamos al "Érase una vez..." ¡qué triste! Y no poder llorar... hace tiempo que no lloro. No poder llorar es lo peor que me está pasando en estos últimos meses. Parece que todas las lágrimas se han vuelto cinéfilas y sólo dan señales de vida cuando veo Titanic. No, si encima de desenamorado seré el cursi de los paquetes de Clinex. Sálveme (y séqueme) quien pueda. No voy a encontrar a nadie con este currículum amoroso.
Hasta aquí ha llegado el camino que seguía por ti, pero sin ti. El camino por encontrarte, por alcanzarte, el camino con la esperanza de un contigo. No, si cursi, cursi, lo que se dice cursi, siempre he sido. Pero no me quites protagonismo. Adiós. ¿Debería decirte algo más? nunca me han gustado las despedidas, nunca me han gustado los trenes que se marchan. No sé qué decir que pueda añadir un poco de calor a este frío. Supongo que las despedidas son frías, por eso en verano no duelen tanto. Por eso... adiós, hasta pronto. No, hasta pronto, no. Déjame volver a intentarlo: "Adiós, se buena". No, espera, no quiero ser tu padre. Yo... déjame volver a intentarlo una última vez:
Adiós, se feliz.
Sí, creo que esta vez lo hemos conseguido. Estoy orgulloso. Cuídate
a mi tampoco me gustan las despedidas...
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