lunes, 6 de junio de 2011

2 de septiembre de 1924


El 2 de septiembre de 1924 pasaron muchas cosas. Por ejemplo, seguro que alguien se compró un sombrero, seguro que alguien compró una barra de pan en esa panadería de la esquina, seguro que muchos niños jugaron al pilla-pilla. Y la verdad es que el 2 de septiembre de 1924 no fue un día tan especial. Los días no son especiales para todos, pero aquel 2 de septiembre de 1924 la abuela María nació y eso lo convierte en un día muy especial para mi.

La abuela María es la figura más representativa de mi familia porque tiene 86 años y no se muere y eso... eso la convierte en el miembro de la familia con más horas de vida. Imaginaos, he tenido abuela María durante mucho tiempo. La abuela María odia a todo el mundo, me odia a mi, odia  a mi madre, a mi padre, a mis hermanos y a mi perra de vez en cuando. Si mi perra hablase otro gallo cantaría. La abuela María disfruta discutiendo, creo que siempre quiso ser reportera de Telencinco. Las frases más usuales de ella son: ¿tú te crees?, me cago en la puta, me estáis matando "a poco a poco", esta casa parece un putiferio... 

No quiero que penséis que la abuela María es una mala persona. También te regala caramelos, te da propina si vas a comprar a Mercadona y te hace unas comidas excelentes. Es decir, la abuela María es bipolar. Compagina su duro trabajo doméstico, con sendos insultos y con alguna muestra de afecto.

A la abuela María al final, acabas queriéndola sin querer. Así es ella, claro ejemplo de que la belleza está en los actos y no en... ¿las palabras? La abuela María es tan genuina, es tan única, tan... yo quiero ser como ella. No, no quiero cambiarme de sexo, pero quisiera ser tan imprescindible y a la vez tan irritante para alguien. ¿Cómo puedo odiarla y amarla a la vez? Supongo que son años y años de experiencia. 

Estoy seguro de que algo os habrá quedado de la abuela María y también estoy seguro de que no la podréis apreciar tanto como yo. Es un espectáculo estar con ella, ser testigo de esas historias que cuenta, historias que sucedieron hace 60, 70 años. Es como una ventana indiscreta que mira al pasado. Es como una recopilación de esas cosas que no estarán aquí dentro de unos pocos años. Es lo que queda de lo que se fue. 

Y esto es todo lo que puedo deciros de la abuela María. Podría deciros más cosas, hablaros durante interminables días de sus manías, sus carencias y sus virtudes. Podría hablaros de todos esos pequeños detalles que no olvidaré nunca y que luego contaré a mis nietos y, vaya, en realidad por aquel entonces ya habré olvidado los pequeños detalles. Es una pena pero así es la vida, no queremos hacer lo que acabaremos haciendo.




La abuela María


2 comentarios:

  1. Sergioooo! qué bonitoo! :D yo tambien conozco a la abuela María!!

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