domingo, 23 de mayo de 2010

Ultimatum

Ando pensando últimamente en el desgaste de pensamientos, que acabará, temprano o tarde, haciéndome caer en una espiral de locura que hará de mi algo o nada.
Quizás deba replantearme el manicomio cuando encuentre sentido a la pregunta que se formó en mi cabeza aquel, ya lejano, 39 de Diciembre de 2007, cuando los días no eran sino la suma de los sueños que no conseguiría jamás...

"Todo esto no es más que un aburrido puzzle del montón; no es más que una estrella que brilla en el firmamento"

Que gran verdad y, a su vez, gran locura.
Palabras que cobraron sentido ayer, hoy no son sino dagas que intentan penetrar este armazón de hierro, que es mi Conciencia Sobre la Verdadera Realidad y la Distorsionada Realidad.
No soy más que otro número de la suma que nos suma a todos, y por ello, tengo tanta importancia y desinterés por ser parte del resultado como cualquier elemento matemático que desea, en este mundo, formar la perfección del átomo o ser el culminante 7, número mundialmente mágico.

Pero, ¿por qué sigo aquí?, ante un silencio que no dice nada y ante una verdad que aterroriza tanto que no la creo, sino que hago como si no existiese y me hago el loco; algo que aprendí a hacer en la Escuela de la Vida, cuando era un niño callejero de tez pensativa y vivía ilusionado con los cromos que compraba a cuatro duros en el kiosco de la esquina.
Sigo aquí porque no hay nada más allá de ahí o de allí... Otra verdad que tanto me cuesta reconocer pero que cada esquina me acaba enseñando.

Y, ¿las personas? Si... podría decirse que cargamos todos con la carga de todos y, de tal forma, vivimos más felices cuando sabemos que agilizamos las espaldas de los demás; cuando sabemos que habrá un hombro en el que descansar cuando no quede aliento en los pulmones.
Pero yo veo más allá de lo que me muestra el hoy y no encuentro sino sombras que especulan mi destierro; mi eterna soledad.
"Estás solo, chico" diría Tom Spencer.
Yo creo que morí cuando quise nacer o, lo que es lo mismo, cuando tuve que nacer... Supongo que todos lloramos al salir del vientre materno porque no quisimos jamás que nos sacasen de aquel lugar de paz, lejos del conocimiento y del envejecimiento; de la duda y la respuesta, que son y seguirán siendo pan de cada día.
Y los que no lloran son sadomasoquistas... así es la vida, que no os engañen, todo se perfila por lo natural, y lo que no es natural, no tiene lugar en este Top de, digamos, verdades que no necesitamos verificar.

Si algún día me preguntas qué se me pasó por la cabeza aquel 39 de Diciembre de 2007, te diré que todo era mentira, y tú me creerás, o fingirás creerme; porque la verdad, a nadie le gustan las preguntas sin respuesta, excepto a los curas y a los políticos.

Nadie querrá saber si lo que dije fue verdad. O si de este puzzle se perdió la última pieza, y todos se dieron cuenta cuando la ilusión de colocarla les llevó a buscarla.
Nadie, ni siquiera yo, volverá a andar por estas letras de sangre y ceniza.


Para el pez de la pecera de cristal (como los viejos tiempos)

4 comentarios:

  1. Tus relatos son algo con lo que soñar cada noche y levantarse a la mañana siguiente a las 7 de la mañana con una sonrisa x)
    Pero... ¿dónde están las calles de piedra? XDDD
    Que no hombre, que está superchupiguay, que me ha encantado XD tienes que enseñarme un día a escribir la mitad de bien.

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  2. dios,,quá pasada de blog!!!me encanta el diseño de la template...es una pasada!!!me encanta cómo escribes, la frescura que tienes..no sé...me gusta...te sigo!!!te espero por el mío:
    http://lovingmeghannebynes.blogspot.com/

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  3. Las calles de piedra...
    tendré que retomarla Jajajaja Me encantan!
    :P
    Graciass por tu coment Irene!

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