domingo, 19 de mayo de 2013

Caer


Que queríamos escapar, sí, pero no sabíamos hacia a dónde. Que sólo queríamos salir, irnos muy lejos, allí donde ser nosotros mismos no fuese tan difícil. Donde no decir "te quiero" estuviese prohibido y donde el orgullo no jodiese las cosas bonitas. Pero de querer a hacerlo, qué os podría decir, hay un abismo muy parecido a la peor indecisión del mundo. Y te das cuenta, un domingo como hoy; como cualquiera; de que no puedes correr mucho, que no lo suficiente, que no tanto como para llegar a alguna parte. No sé si me explico. Y te tumbas en la cama, aturdido, sin poder llorar porque tú ya no lloras; sin poder gritar porque hay gente viendo la televisión. Te tumbas en la cama y es un poco olvido, pero hacia adentro, un dejarse caer en el colchón deseando que alguien te rescate cuando haya alguna vacuna contra las cosas que no tienen mucho sentido. Pero no. Y así se te va pasando la vida. Y que quizá por eso odiamos un poquito los domingos. Y mañana lunes, como si quisiéramos morirnos tan rápido. Algo va mal en el mundo y yo qué sé, quizá sea porque estamos perdiendo la bonita costumbre de declararnos escribiendo un poema a la persona que nos gusta. O porque ya no sabemos abrazar como antes. O porque tenemos tanta prisa en llegar a los sitios que no disfrutamos de las vistas, ni de las sonrisas, y que todos nos maquillamos ahora un poquito y que ya no somos nosotros tanto tiempo. Es esa decadencia a la que llamamos rutina. Y yo empiezo a no saber sobrevivir tanto como me gustaría. Empiezo a desear enamorarme con esa urgencia en la mirada de que si alguien no me coge de la mano pronto voy a desintegrarme. A evaporarme. A tener la sonrisa más triste del mundo. A tener los calcetines, en los cajones, desemparejados; por ese no querer pensar en los abrazos. 


  

6 comentarios:

  1. aveces me da miedo leer lo q escribes, calcas lo q siento

    ResponderEliminar
  2. Joder me encanta como escribes, tienes una manera perfecta para reflejar las emociones!! te sigo en el twitter y también tu blog, si puedes pásate por mi blog y síguelo, muchísimas gracias y besos (K)http://siendopoesiadesde1997.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  3. 'Y yo empiezo a no saber sobrevivir tanto como me gustaría. Empiezo a desear enamorarme con esa urgencia en la mirada de que si alguien no me coge de la mano pronto voy a desintegrarme. A evaporarme. A tener la sonrisa más triste del mundo. A tener los calcetines, en los cajones, desemparejados; por ese no querer pensar en los abrazos.' Mi parte favorita :)

    Y, sobre todo, la imagen. Who knows where home is... Well, at least not me.

    ResponderEliminar
  4. Joder... malditas personas (como tú) que escriben tan jodidamente bien.


    http://www.gatosdebiblioteca.blogspot.com

    ResponderEliminar
  5. Y desde aquí tumbada en mi cama, en un caluroso domingo, leo por primera vez lo que escribiste otro domingo cualquiera. Nunca me han gustado los domingos, será porque a veces me entran ganas de llorar sin saber por qué o porque me entran ganas de reinventarme y no sé muy bien dónde empieza el camino.

    Gracias por compartir tus palabras, me han hecho sentirme un poquito menos sola en el mundo.

    ResponderEliminar
  6. 2016 y seguimos igual, recibiendo intravenosa versos para justificar lagrimas, para llenar huecos, pasar sentirnos menos solos. "¿En que momento alguien toca fondo y es de verdad?". "¿Cuando coño dejaremos de tener miedo".

    ResponderEliminar