martes, 12 de marzo de 2013

Momento de reflexión


¿Cuántas fotos tuyas con otro voy a soportar hasta romperme y dejar de ser, y olvidar? ¿Cuántas ganas muertas de hablarte de nuevo y decirte que, por desgracia, el tiempo ha pasado y tú sigues aquí, dentro, en todo aquello que vivimos? ¿Cuántas veces voy a querer raptarte de este presente en el que ya no somos, y retroceder en el tiempo a base de rescatar los buenos momentos que pasamos? Envidio a la gente que sabe olvidar. 

Recuerdo que la última noche estábamos inmersos en aquel silencio de no saber muy bien qué decir, dándonos la espalda, como despidiéndonos de malas maneras, sin mirarnos a los ojos, y es que quizá, supongo, nuestros ojos estaban envasados en lágrimas al vacío, como sentimientos que nos da miedo expresar, porque nos da miedo mostrar lo débiles que somos. Y es que el desnudarnos tanto por dentro, en tan poco tiempo, es lo que tuvo, que un día despertamos y todo nos hacía daño, y evitábamos el contacto, las miradas, los besos, las segundas oportunidades. Un día despertamos y nos dimos cuenta de que nos queríamos por encima de nuestras posibilidades; de que existe un límite poco definido entre amar de una forma razonable y perder la razón por amor. 

Y, bueno, nuestra historia terminó con un portazo, y sus consiguientes ganas de escapar de todo, y sus respectivas miradas de reojo a la puerta, por si acaso el orgullo te hubiese dado permiso para volver, y mi necesidad te hubiese dejado entrar. Pero por entonces estábamos demasiado intoxicados de todo lo nuestro, y supongo que sólo podíamos correr en direcciones opuestas, alejarnos lo máximo posible de nosotros mismos. 

Y ahora te veo en brazos de otro y, no sé, cariño, no sé si ya arreglaste todo lo tuyo y te volviste a vestir con todas esas apariencias que la gente suele llevar encima, por si los sentimientos empiezan a doler y no  hay salidas de emergencia a mano. Y es que te veo en brazos de otro y me doy cuenta de que no se me da bien cicatrizar, de que durante todo este tiempo he estado corriendo en la dirección correcta, pero que ya he dado la vuelta al mundo y estoy a punto de abrazar, a tu recuerdo, por la espalda. 



4 comentarios:

  1. Me siento igual que tú...
    Te sigo en Twitter, y cada cosa, cada texto que escribes es como si relatara mi vida, mi día a día.
    Este texto me encanta.

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  2. ...Intoxicados de todo lo nuestro... (me encantó)

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  3. ...Intoxicados de todo lo nuestro... (me encantó)

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  4. La estas haciendo daño... no la dejas continuar, no se que buscas con toda esta mierda.. ¿si la quieres por que la abandonasteis asi? ¿tan difícil es hacer lo correcto? Por tu culpa llevamos 7 meses para intentar ser felices, y siempre vuelves y haces que se cuestione a si misma.. me da igual mi vida, ya lo has jodido todo.. pero a ella dejala continuar por que no seré el único que la intente hacer feliz.. joder haz lo correcto... lo esta pasando fatal.. y tu te estas comportando como un niñato..

    Mi santoDomingo..

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